Rozamayor -por El Carboneru- - 39X28 ALTIMETRÍAS

Hace más de dos años, cuando arrancó este blog, una de las primeras ascensiones que puse fue la de Rozamayor, pero subiendo por el alto de Cueña y desde ahí tomar el desvío al área recreativa, lo que conformaba una dura subida de casi 5 kms a un 9,5%. Poco después también incluí la altimetría del Carboneru, pueblo situado, también como Rozamayor, en la falda del Picu Polio y que pensaba que conectaba con este área recreativa. Y tras darle vueltas y más vueltas al mapa, de preguntar a varios compañeros de esta "locura de las cumbres", al fin, he dado con esa vertiente que sí conecta el pueblo del Carboneru con el área recreativa de Rozamayor, lo que puede convertirlo en un puerto de paso, aunque, vistas las condiciones en las que se desarrolla hoy por hoy el ciclismo de competición, se alejaría, sin duda, del mismo. Pero no del cicloturismo. Describamos, pues, esta nueva vertiente de Rozamayor.

Partiendo de Mieres, junto al polígono de Vega de Arriba, tomamos el desvío que nos conduce a Vegalafonte y el campo de tiro. El primer tramo es vertiginoso, con pendientes que oscilan entre el 14 y el 16% e impresionantes curvas de herradura, como se verá en las fotos que hay abajo. El primer kilómetro es realmente desolador, ya que la pendiente media es superior al 11%. Pero lo que viene a continuación, hasta el pueblo de Rozaes de Bazuelo, tampoco desmerece, ya que si bien mengua la pendiente, ésta se mantiene en torno al 8-9%. Y será ahí en donde tomamos el desvío hacia Brañanoveles (ya descrita en este blog) y Tablao. La carretera, con un piso excelente, se estrecha, y abre el primer descanso, ya necesario tras el espectacular y durísimo inicio. Paulatinamente la pendiente irá aumentando hasta situarse en el 8-9%, con algunos respiros entre medias. Y así hasta que llegamos al desvío hacia Carboneru. Será conveniente que metamos aquí todo el desarrollo que llevemos sobre nuestra bicicleta, porque la rampa que viene a continuación es de órdago. Todo un 22% que abre la fase más dura de este pequeño coloso, ya que tras esta rampa, y un pequeño descanso, viene otra recta que parece dirigirse hacia el cielo, ya que la pendiente llega al 19%. Y llegamos así al pueblo de El Carboneru… Giramos a la izquierda por una de las caleyas y la carretera que se estrecha aún más. El asfalto es ahora bastante irregular, aunque se transforma pocos metros más allá en hormigón. La sucesión de rampas duras y descansos será predominante durante el resto de la subida, lo cual hace que la pendiente media no refleje con exactitud la dureza de una subida peculiar. Destacable es, por encima de todo, uno de los tramos finales: 300 metros cuya pendiente ronda el 18% y que se ve salpicado por rampas que alcanzan el 22%. La ascensión irá perdiendo intensidad a medida que nos acerquemos al área recreativa.

Esta es la altimetría de la subida: