Everest con



Hacía varios años que tenía en mente la idea de hacer un Everest de manera circular, culminando en el Gamoniteiru. La otra vez, con varios sube-baja, el diseño era más sencillo puesto que logras quitar tramos llanos y juntar aún más las ascensiones, condensando el desnivel. Era todo un reto, por tanto, el diseño de esta ruta tan especial. Mi idea inicial era, curiosamente, la que finalmente consiguieron culminar el sábado 30 de mayo: Cobertoria, Trobaniello, San Lorenzo, Corredoria, Santianes, Maravio, Cruz de Linares, Campa Dosango, Collada, Viapará, Cordal y Gamoniteiru. Más adelante, tras hablarlo más en público comenzaron las divagaciones y las variaciones, quedando conformado de otra manera, con una zona central en la que tenía dudas, puesto que tras Corredoria entraría las Cruces por una carretera que desconocía completamente...
Se hizo público por aquí, por varias redes sociales y foros, y, finalmente, conformamos un grupo de siete cicloturistas dispuestos a hacerlo íntegramente, además de otros dos (Fran y Eugenio) que se sumarían, uno hasta que las fuerzas dijeran basta y otro más adelante, con leves variaciones respecto a nuestro recorrido.



Salimos a las cinco de la mañana, aproximadamente, del 30 de mayo de 2015 dispuestos a afrontar el primer puerto del día. La furgoneta de asistencia, que llevaría Roberto, nos acompañaría a partir de Teverga, pero en puntos concretos.


Everest con (30-5-2015) DESNIVEL APM Longitud Pte.Media <4% 4-7% 7-10% >10%
Cobertoria 868 277 9,9 8,76% 1 2 2 5
Trobaniello 1132 258 16,7 6,77% 2 10 3 2
San Lorenzo 884 258 11,2 7,89% 1 5 0 5
Corredoria 632 171 7,5 8,40% 0 1 5 1
Santianes 196 57 2,65 7,39% 1 1 0 1
Maravio 776 182 11,6 6,69% 0 8 3 1
Cruz de Linares 620 180 7,2 8,61% 0 2 2 3
Dosango 459 151 6 7,65% 2 1 1 2
Collada 250 113 2,1 11,90% 0 0 1 1
Viapará 468 95 9 5,20% 4 2 3 0
Cordal 497 90 8 6,21% 1 6 1 0
Gamoniteiru 1459 469 15,6 9,35% 0 3 5 8
TOTAL 8241 2301 107,45 7,66% 12 41 26 29



Salida desde el kilómetro 0 del cicloturismo, en Pola de Lena, en la señal indicadora de los puertos.




Esta primera ascensión la hacemos de noche, en grupo, sabiendo muy bien que aún quedaba todo...


Posando en la Cobertoria, el primero del día, y ya había luz, lo que facilitó el descenso muy mucho.








Viene a continuación el "coco" de esta primera fase de la ruta: Trobaniello. Puerto con un largo tramo de tierra, zonas que alcanzan el 20% y que acumula, junto a la Cobertoria, un desnivel de 2000 metros. Es uno de los peores encadenados de la península...

En la cima de este puerto, a pocos kilómetros de Ventana, por donde bajaríamos ya en asfalto, con una meteorología espectacular. Todo acompañaba...







En Teverga hacemos la primera gran parada para quitar ropa, iluminación, tomar algo... Javi arranca y me voy con él para ir reiniciando la ruta. El resto no se percató y tenemos el primer "cruce de diferencias". Miguel achaca a Javi no haber avisado, éste responde que tiene toda la razón y yo señalo que se está perdiendo demasiado tiempo, que se había arrancado para ir poco a poco, no para dejar a nadie tirado. No ocurre nada, estamos ya en San Lorenzo, el duro San Lorenzo.
Será mediada la subida donde nos encontramos con Eugenio, que ha salido de Pola, se ha subido Cobertoria, San Lorenzo E, San Lorenzo W y ha bajado a nuestro encuentro. Su desnivel era superior al nuestro. Su idea era aguantar hasta donde se pudiera.

Se forman grupetas para ir subiendo. Unos más adelante, otros más atrás, lo que será la tónica habitual del resto del día. Hasta que cae San Lorenzo en el kilómetro 70 y alcanzamos los 2950 metros.







A partir de ahora vendrán varios kilómetros favorables, con la previa de Corredoria, ascensión que cerrará la primera fase de la ruta. Variamos el lugar propuesto para comer: mejor en la cima de Corredoria con la comida que llevamos en la furgoneta. Eso nos ahorrará tiempo y dinero, pensamos.
Corredoria, puerto similar a Cruz de Linares en números globales, vuelve a romper el grupo mediada la subida, a partir de San Martín de Ondes, cuando tratamos de vencer la fuerte rampa que hay a la salida del pueblo.
Aún con muchas fuerzas, con buenas caras, cerramos esta primera parte en la Corredoria con 3700 metros acumulados. Es la hora de comer, cuando todavía no son las dos de la tarde. Será durante la misma cuando empezamos a debatir sobre el cambio de ruta y señalo que la mejor opción es pasar directamente al Maravio para quitarlo rápido, a través de Santianes. Los metros que no sumamos en esa zona los haríamos en Cruz de Linares. Mi apuesta es ir por mejores carreteras y acercarnos a la parte central para acumular allí lo que fuera necesario. Esa fue mi decisión como organizador y diseñador de la ruta.








Santianes es corto, pero con rampas bastante duras. Aún así nos mantenemos en grupo, en espera de que llegue otro de los platos fuertes del día, el largo Maravio, que esta vez subiremos por la vertiente clásica de Vega Villaldín, con su dura segunda parte.



Es a partir de ahí donde noto que el esfuerzo empieza a pasar factura porque Miguel va atrás, descolgado. Javi y Luis se quedan con él y el resto nos mantenemos por delante. Me empiezan a entrar las prisas y  comento que Miguel ha cometido la imprudencia, en mi opinión, de subir el Angliru el día antes.
Si no tiramos se hará tarde, muy tarde, por lo que  les comentó mi intención de no parar en la cima de Maravio. Me iba a costar caro, malas caras, pero era mi apuesta, porque yo también quería alcanzar el Everest, acabar la ruta en el Gamoniteiru. Pensaba que si ya iba descolgado en esa primera parte, antes de Villabre, la cantidad de tiempo perdido podía ser letal para el reto propuesto.
Otro punto de controversia fue la carretera. Opto por meterles por la bajada de Villamayor, cortada al tráfico, en lugar de Prado, muy bacheada. La furgo se va por delante, lógicamente por la segunda, perdemos el contacto y espera en la capilla de Santa Ana. En plena bajada trato de contactar, llamar, escribir, pero nada. Pierdo todo contacto con el coche de asistencia durante varios kilómetros. Será en Villamayor, cuando nos alcanzan Luis, Miguel y Javi. Trato de explicarme y pido perdón por lo hecho. La culpa, como ya les señalé allí, fue mía.






Foto incompleta en el Maravio.






El siguiente del día será la Cruz de Linares, donde contamos con colocar el desnivel por encima de los 5000 metros de desnivel. Ya he logrado contactar con la furgo, aunque Roberto no controla mucho esta subida. Sin embargo aparece en la cima, mientras vamos llegando a cuentagotas. Nuevo avituallamineto antes de la última fase. Siguen sin salirme las cuentas, y eso que no hemos tenido ni una avería.


Foto en lo alto de Cruz de Linares, con Javi, que abandonará en ese momento.





Bajamos por Castañedo del Monte en busca del siguiente puerto del día, con varios kilómetros pestosos antes. El grupo entra fuerte en las Xanas, al inicio, pero rompe en mil pedazos. Mis cálculos para llegar a la altitud del Everest en Gamoniteiru no salen, mis cálculos para llegar de día no salen. Aún quedan bastantes ascensiones, y sobre todo ésta, este muro.

Foto en Dosango, la durísima subida donde Estrada nos estuvo viendo. Esta vez no pudo ser en bici.



El siguiente era la Collada, corta y durísima subida a la salida de Santa Eulalia de Morcín, con rampas que rápidamente se ponen por encima del 20%.
Cuando coronamos Collada son ya las 8 y media de la tarde. Hay poco tiempo de luz, del día despejado hemos pasado a cielos cubiertos. Pasamos por delante de esa subida a la Vara que decidí suprimir. También fue mi decisión porque se hacía tarde y hubiéramos tardado bastante, tanto en subir como en bajar.



En Viapará el grupo marchaba de nuevo disperso. Continuaba yéndose mucho tiempo en paradas y  me lo empecé a tomar con filosofía. Otra vez más si llegaríamos al Everest en Gamoniteiru, a lo que contestaba que no. No quedaban muchas variantes en ruta, a no ser qué se subiera lo andado ya.
Llegamos a Viapará, donde hay buenas caras porque Lena se acerca, el final del reto se acerca y todo lo peor lo hemos quitado. Sólo Cordal y Gamoniteiru final. La furgo continúa con nosotros, lo que sigue alargando el tiempo en paradas a quitar, poner ropa, comer, beber,... Mala estrategia la que escogí, porque se fue aún más tiempo. Es lo que pienso. Mis cálculos indicaban empezar a subir antes de que oscureciera. Craso error.



En el Cordal quiero aislarme de todo y de todos. No llevo buen humor por muchas razones: el desnivel acumulado, las horas que son ya, el montón de horas en la bici,...
Siento fallar a la gente en los cálculos. Veía ilusión por conseguir el Everest en ruta, pero no era posible. Opté por quitar la Vara porque era tarde, opté por variar la ruta por ir por mejores sitios,... No se podía hacer nada, así que cuando llegamos al Cordal yo ya tenía pensado lo que hacer.
Posamos en la cima del Cordal, la última foto con el grupo. Cuando llegamos a Pola les comento que no sigo, que no puedo más... Cada uno contra el Gamoniteiru para culminar la ruta. Luis, Miguel, Vidal, Alfonso y Carlos se lanzan a subir el puerto definitivo, en tanto que Fran, satisfecho con la ruta, y yo, nos bajamos de la bici. Eugenio también da por concluida la ruta con sus más de 7400 metros de desnivel y un montón de puertos en el saco.
Necesito respirar un poco y librarme del agobio en lo que había convertido todo esto.


Enhorabuena a los que han logrado culminar. No miento si digo que me hace especial ilusión que Luis rematara la ruta. Hemos compartido bastantes puertos y momentos, y verle tan feliz me gustó, y mucho. Pude felicitarle tras bajar del Gamoniteiru, cuando los temblores fruto del frío se mezclaban con la emoción.
Los malentendidos los dejaremos pasar y perderse en el olvido. Quedaros con esta fenomenal ruta los cinco.