Una dura ascensión la que nos ocupa en esta ocasión. Situada en el concejo de Laviana, ésta es la vertiente de La Rebollada que asciende a la Campa La Espinera, cuya otra cara presenté hace unas semanas. El bucle que se podría realizar con esta corta subida, hormigonada en su parte final, sería escandaloso, con varios tramos al 10-11%. Esta cara arranca también de Pola de Laviana, aunque no de forma tan abrupta. Unos 500 metros con pendientes al 7-8% nos situarán ya por encima de las mismas calles de la capital lavianesa la cual podremos ir contemplando con relativa calma en la zona posterior casi llana, mientras la carretera se va metiendo en el bosque en busca de la subida definitiva a La Rebollá y la Campa Espinera. Y será a partir, aproximadamente, de Les Portielles en donde la "furia" de las rampas se descargue sobre nuestro cuerpo. Rampas al 10, al 12 y al 13% se sucederán sin descanso durante 3 kilómetros. La carretera, impecable a fecha de hoy, ayudará en buena medida a que no nos "arrastremos" antes de llegar a La Rebollá, lugar en el cual el panorama cambia por completo. El firme se vuelve bastante irregular, hasta que se vuelve de hormigón, la arboleda se despeja casi por completo y deja ver todo lo que nos queda por ascender, que es mucho. Todo un espectáculo más digno de colosos de mayor entidad. La parte final es muy engañosa a la vista de las imágenes, pues parece de mayor dureza. Culminamos la ascensión en la denominada Campa La Espinera a casi 700 metros de altitud y tras 6,5 kilómetros a una pendiente media que ronda el 6%.

Este es el perfil de la subida:

Y ahora unas imágenes:

Tomamos la carretera que se dirige al mercado de ganado de Pola de Laviana.

Pero en lugar de seguir de frente nos desviamos por aquí (a la derecha), ascendiendo por donde se encuentra el coche blanco. 

Dejamos la zona empedrada y afrontamos un corto tramo con alguna pendiente reseñable.

Asfalto impecable hasta el pueblo de La Rebollá.

Llegamos a Les Portielles, en donde las rampas van a tornarse serias. 

Y comienza el espectáculo... 

Rampas muy duras las que hay que superar en esta ascensión.

Llegamos a La Rebollá.

La fisonomía de la carretera cambia por completo.

Aún por asfalto en busca de la zona más alta del pueblo.

Y llegamos al hormigón...

Espectacular imagen del paso por La Rebollá.

Una de las zonas suaves antes de culminar la subida. 

Y la rampa final que llega hasta la Campa La Espinera.

Mapa de la subida en Google Maps: