Posibles finales asturianos para la Vuelta a España 2020

  
Javier Guillén, director de la Vuelta a España, señaló que en el recorrido de 2020 apostarán por puertos ya conocidos en Asturias, con lo que la terna de finales se cierra respecto a años anteriores. No parece probable que repitan los de la última edición (Acebo y Cubilla), si nos atenemos a lo ya realizado en otras ocasiones: desde 1999 (y 2000), con el Angliru, no se ha llegado dos años consecutivos a la misma cima.
Repasando el resto de opciones de los últimos años (con final en alto) tendríamos lo siguiente:
2018: Lagos de Covadonga y Praeres.
2017: Angliru.
2016: Lagos de Covadonga y Naranco.
2015: Ermita de Alba y Sotres (la Caballar).
2014: Lagos de Covadonga y Farrapona.
2013: Angliru y Naranco.
2012: Lagos de Covadonga y Cuitunigru.
2011: Angliru y Farrapona.
2010: Lagos de Covadonga y Coto Bello.
En ese listado de las últimas ediciones (desde 2010) parece que estarán los finales asturianos. Si nos remontamos al resto del siglo Fuentes de Invierno (2008) puede estar descartado (San Isidro suena como final en León), al igual que Cobertoria por Llanuces (2006) teniendo en el mismo concejo Ermita de Alba...




La llegada emblema de la Vuelta y favorita número 1 como meta el año que viene en Asturias: Lagos de Covadonga (año par, con lo que ello supone en los últimos tiempos). Unipublic ha revitalizado en los últimos años esta ascensión con recorridos de mucho empaque (y dureza) que han dado como resultado los triunfos de escaladores de renombre internacional (y favoritos en la carrera) como Nairo Quintana (2016) y Thibaut Pino (2018).





Praeres

El sorprendente estreno de la Vuelta 2018 es un tipo de subida que  va totalmente con el estilo de Unipublic: un muro en el sentido más amplio de la palabra. Cuatro kilómetros a más de un 12% de pendiente media...  En 2018 contó con un recorrido previo espectacular por las cuencas mineras, pasando Mozqueta y Faya de los Lobos entre otros.






La dura ascensión quirosana no ha vuelto a sonar desde aquel 2015 en el que fue culminación de una etapa durísima que rivalizó en desnivel con la mediática (y "puritana") jornada andorrana. Alba, con unos números apabullantes (7 kms al 11% de media y rampas por encima del 25%) enlaza inmejorablemente con Cobertoria por Lena, con lo que conforma un "dueto" en el que no haría falta prácticamente más para culminar un buen recorrido...







El otro estreno de 2015 fue esta imponente subida, muy irregular, que culminaba en un "muro": el tramo de Sotres hasta el collado de la Caballar. Como Lagos, el Jitu de Escarandi (como también es conocida esta subida) no cuenta con grandes puertos alrededor, pero sí varios "segundas" y "terceras" que bien valen para endurecer cualquier etapa: Tornería, OrtigueroMajadas del Pando.





Farrapona




El alto de la Farrapona fue final de etapa en 2011 y 2014, cuando pudimos disfrutar del duelo  entre Chris Froome y Alberto Contador, resultando vencedor el segundo. Farrapona, un puerto que enlaza perfectamente con San Lorenzo, es una ascensión larga, de desgaste, alejada del estilo  de la Vuelta, más de rampas y explosividad. La Farrapona podría tener un papel similar, en el tipo de etapa, al de la Cubilla este año: con un recorrido con grandes puertos como el propio San Lorenzo, y Cobertoria o Cruz de Linares antes, por ejemplo.




Cuitunigru entró en la Vuelta a España de 2012 y podemos considerarla la segunda meta más dura de la historia de la carrera, tras L'Angliru. Rampas que llegan al 26%, con tres kilómetros finales de órdago, una ascensión que encaja perfectamente en lo que quiere Unipublic. El hecho de alcanzar una estación de esquí, con toda la infraestructura ya realizada, con buenos equipamientos, supone un atractivo incuestionable: aquí no habría que hacer explanada ni habría problemas a la hora de "desalojar": la cima del Cuitu se encuentra a 6 kilómetros de la carretera nacional N-630.




El alto del Naranco es el segundo final en alto, asturiano, más visitado, tras Lagos de Covadonga. Naranco, uno de los grandes clásicos del ciclismo, culminación de etapas que están en la retina de muchos aficionados (Fuente 1974, Rominger 1993) entró en 2013 y 2016. El coloso oventense podría ser el final adecuado de una etapa reina de la Vuelta, alejada de los parámetros de las últimas ediciones, dando opción a ver movimientos lejanos al contar con números (y rampas) por debajo de los colosos vistos en este mismo reportaje: Cuitunigru, Alba o Farrapona.






El gran coloso de la Vuelta a España, el más temido, a pesar de los múltiples estrenos de las últimas ediciones, es, sin duda alguna, el Angliru, el cual fue incluído, por última vez, en la ronda española de 2017. Fue en una etapa que sirvió de despedida de Alberto Contador, único corredor que ha vencido dos veces en su cima: 2008 y 2017. Unipublic ha sabido dosificar con sumo mimo al Angliru desde su estreno en 1999 y, tres años después, podría tener su oportunidad...





Coto Bello

La cima allerana de Coto Bello sirvió para dar a conocer al gran público, en su única inclusión (en 2010) a uno de los mejores escaladores de los últimos tiempos: Mikel Nieve. Con 10 kilómetros tremendamente regulares (poco más de un 8% de pendiente media), poco se ha rumoreado sobre su inclusión en estos últimos años, pero, ¿por qué no en esta ocasión? Coto Bello es un puerto alejado de los parámetros "unipúblicos" (sin rampones) y puede enlazarse con Collaona, Mozqueta, Colladiella,...





¿Y tú qué opinas?
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