Etapa antológica en la Vuelta a Asturias 2010

  
2 de mayo de 2010. Quinta etapa de la Vuelta Ciclista a Asturias. El pelotón de ciclistas se prepara para afrontar uno de los recorridos más espectaculares que se hayan diseñado en la historia de la ronda asturiana. Tal vez sea la etapa más dura que nunca se haya hecho en la misma, y eso que su final no es un puerto de montaña, aunque si “pica” para arriba en las mismísimas calles de Oviedo. La organización, al fin, se ha decidido a aprovechar al máximo las posibilidades que la orografía asturiana presenta, dejando a un lado los puertos tradicionales (Leitariegos, Espina, Naranco,…) cambiándolos por otros que los aficionados esperaban desde hace tiempo: Pozo de las Mujeres Muertas, San Lorenzo y Campa Dosango. Esto parece ser el principio de algo grande, de algo grandioso para el ciclismo. No sería descabellado pensar que en ediciones futuras la organización se decantara por introducir puertos que, sorprendentemente, siguen inéditos para la competición profesional: La Marta, La Bobia, Cuchu Puercu, Llomena o Jitu de Escarandi.


Este es el perfil que presenta la última etapa. Un auténtico diente de sierra.


De esta etapa se lleva hablando semanas, desde que la organización diera a conocer el recorrido definitivo. La mayoría de los aficionados estima que destrozará la Vuelta a Asturias en mil pedazos. Otros, más escépticos, no lo tienen tan claro y creen que tanta dureza puede contribuir a que el miedo se apodere de los ciclistas. Se compara su desnivel (de más de 4000 metros) con las más grandes del Tour y del Giro. Hay gran expectación por ver el resultado que una etapa de estas características puede tener en una carrera pequeña como es la Vuelta a Asturias, la cual puede verse eclipsada. Pero el rendimiento de los corredores no deja dudas, la ronda se pelea desde un principio y nadie regala nada. En estas condiciones, y tras una exhibición rotunda de los ciclistas del Café de Colombia, Cano y Duarte, en el Acebo, el pelotón toma la salida de la quinta etapa de la Vuelta a Asturias.


Vistas del impresionante último puerto del día: Campa Dosango (el cual era desconocido por los comentaristas...).

En el perfil no aparece prácticamente el llano, es un continuo sube-baja, con un puerto tremendo ya de inicio: el Pozo de las Mujeres Muertas. Luego, un terreno rompepiernas con dos puertos de tercera, Cerredo y Somiedo, antes de llegar a la fase definitiva: San Lorenzo y Campa Dosango.

 


Zaballa, destrozando la carrera.

Los ataques se suceden y las diferencias que, en otras ediciones podrían ser definitivas para una última etapa, en esta ocasión parecen mínimas. Al paso por Proaza, antes de llegar al puerto definitivo, Campa Dosango, el pelotón rueda completamente roto. Esto más parece una de esas jornadas dolomíticas con las que tanto nos hemos emocionado. No hace falta atacar puesto que la dureza de las rampas es tanta que a ritmo los corredores se van. El líder se queda en solitario con un fenomenal Santi Pérez que ejerce de freno en la tremenda recta del Tenebredo. Posiblemente Duarte, el maillot amarillo no creyera que la última etapa tuviera unas características tan dantescas y que la renta que obtuvo el día anterior fuera suficiente. Todo esfuerzo parece en vano. El puerto no se acaba en Tenebreo, gira a la derecha y la confusión se apodera de los mismísimos comentaristas de la televisión Autonómica, quienes muestran un desconocimiento absoluto de esta última ascensión. No, no era una bajada tras Tenebredo y 800 metros de fuerte pendiente. El puerto tiene en conjunto 6 kilómetros y tras ese desvío todavía tiene algún kilómetro a más del 10% y rampas que alcanzan el 17%. Los corredores parecen no encontrar el desarrollo adecuado y las “piñas” son similares a las de las grandes etapas del Giro en las que el Mortirolo o el Zoncolan son protagonistas.

 


Mosquera a la caza del cántabro... pero fue en balde.


El grupo del líder en Campa Dosango.


El espectáculo es máximo y los corredores van llegando de uno en uno, prácticamente, a la empinada recta en la que se sitúa la meta. Zaballa vence en la etapa y en la general final (y eso que salía a 1 minuto y 44 segundos del líder), luego Mosquera, el gran favorito, que lo ha intentado de forma furibunda, dejando atrás a todos sus adversarios excepto al ganador final. Posteriormente Santi Pérez, Vicioso, Duarte,… La etapa ha sido todo un acierto, gracias a un recorrido espectacular y a unos ciclistas que lo han dado todo, reventando la carrera desde el banderazo de salida. Hacía mucho tiempo que no se veía algo igual


Vídeo con los últimos kilómetros de la etapa