Superbagneres



Impresionante ascensión la que llega, en esta ocasión, a la web. Se trata de una subida que fue todo un clásico del Tour de Francia hasta la década de los 80 (y que lamentablemente la organización ha optado por dejar en el "baúl de los recuerdos", al menos, hasta 2023...). En su cima ha vencido ciclistas de la categoría de José Manuel Fuente "el Tarangu", Bernard Hinault, Greg Lemond y, como no, el mejor escalador de todos los tiempos, Federico Martín Bahamontes. El Aguila de Toledo logró la victoria en una cronoescalada  que unía Bagneres de Luchon con su estación de esquí, Superbagneres, en el Tour de 1962. Para los "periquistas", además, es el lugar que  puede considerarse como su cima como ciclista, puede que por encima de su victoria en el Tour de 1988... El 11 de julio de 1989, en aquel Tour en el que llegó tarde al prólogo y en el que perdió sus opciones a la victoria en aquel maldito fin de semana luxemburgués, Perico atacó a fondo en el col d'Aspin en una dura etapa de montaña pirenaica de sólo 136 kilómetros, yéndose con Charly Mottet y Robert Millar, remontando hasta la cuarta posición en la General cuando parecía desahuciado sólo unas jornadas antes (en este reportaje hablamos de aquel Tour).
La ascensión arranca de Bagneres de Luchon, con un primer kilómetros casi llano que servirá únicamente para "engañar" con la pendiente media global (si lo ignoramos tendríamos una subida de 16,3 kilómetros a más de un 7%), sucediéndose ya las rampas duras antes de llegar al desvío al Hospice de France, girando la carretera en busca del valle de Lys, segundo punto de inflexión de la ascensión y que nos ubica en la parte dura, los más de nueve kilómetros de "herraduras", "pelados" y que engrandecen la ascensión, porque a partir de aquí las vistas son sublimes, como bien puede comprobarse en algunas de las imágenes que ilustran esta pequeña descripción. Pero si extraordinario es el trazado de esta segunda parte de subida (l
os nueve últimos kilómetros de subida cuenta con una pendiente media del 8%...), no queda atrás la dureza de sus rampas, con tramos sostenidos al 9-10%, con escasos descansos y una impresionante rampa final de más de dos dígitos que nos conduce a aquella meta mítica que fue en los Tours de los 60, 70 y 80, a casi 1800 metros de altitud.
La ascensión a Superbagneres cuenta con tremendas opciones de enlazado: desde el col de Portillon, a Peyresourde o el port de Bales, nada más y nada menos.

Éste es el perfil de la ascensión:


Y ahora unas imágenes:



La subida, en Google Maps: