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Col de Peyresourde -E-
Hoy
llega a la web una leyenda del ciclismo: el col del Peyresourde se
estrenó en el Tour de Francia, la carrera ciclista más importante del
mundo, allá por el año 1910, en la legendaria jornada de 326 kilómetros
que unía las localidades de Luchon y Bayona. De hecho el col de
Peyresourde fue el primero de los clásicos: Peyresourde, luego Aspin,
luego Tourmalet, luego Aubisque (por Soulor)...
El Col de Peyresourde se inicia en la localidad de Bagneres de Luchon y cuenta con un inicio que va más bien a tirones, buscando siempre el oeste por una carretera en bastante buen estado. A lo largo de la primera mitad dejaremos a un lado el desvío al colosal port de Bales y más adelante, la localidad de Saint Aventin. A partir de ahí sí que parece que la subida se "mete en materia", es más colosal y dibuja un trazado de coloso que también se nota en los números, puesto que la pendiente se mantiene casi imperturbable en torno al 8% hasta alcanzar la cima. Peyresourde no cuenta con rampones, con zonas destacables en cuanto a dureza, sino que ésta proviene más de la ya mencionada regularidad.
El Col de Peyresourde se corona tras 13,8 kilómetros de ascenso a una pendiente media del 6,9%, y se trata de una ascensión que puede encadenarse, antes con Portillon (por España) y, después con Aspin, Azet, Peyragudes,...
Peyresourde cuenta con una amplia historia en el Tour de Francia, y también se pasó, por esta misma vertiente, en la Vuelta a España: en 1992.
El Col de Peyresourde se inicia en la localidad de Bagneres de Luchon y cuenta con un inicio que va más bien a tirones, buscando siempre el oeste por una carretera en bastante buen estado. A lo largo de la primera mitad dejaremos a un lado el desvío al colosal port de Bales y más adelante, la localidad de Saint Aventin. A partir de ahí sí que parece que la subida se "mete en materia", es más colosal y dibuja un trazado de coloso que también se nota en los números, puesto que la pendiente se mantiene casi imperturbable en torno al 8% hasta alcanzar la cima. Peyresourde no cuenta con rampones, con zonas destacables en cuanto a dureza, sino que ésta proviene más de la ya mencionada regularidad.
El Col de Peyresourde se corona tras 13,8 kilómetros de ascenso a una pendiente media del 6,9%, y se trata de una ascensión que puede encadenarse, antes con Portillon (por España) y, después con Aspin, Azet, Peyragudes,...
Peyresourde cuenta con una amplia historia en el Tour de Francia, y también se pasó, por esta misma vertiente, en la Vuelta a España: en 1992.
Éste es el perfil de la ascensión:
Y ahora unas imágenes:
La subida, en Google Maps: