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El alto de la Colladiella es una dura ascensión que separa los concejos de Mieres y San Martín del Rey Aurelio, si bien aglutina mayor dificultad en la cara norte, la proveniente de Sotrondio. Ascensión utilizada en alguna ocasión por la Vuelta a España, como en aquella segunda ocasión en que la ronda española culminó en el Angliru, para sustituir a la Cobertoria (curiosidades de la vida), que con su carretera estrecha y deslizante había acabado con las opciones de triunfo de Fernando Escartín (sobre todo), quien tuvo que retirarse después de una fortísima caída. La Colladiella, sin embargo, se encontraba aún lejos de meta, por lo que sirvió de desgaste, antes del envite final con la "sempiterna pareja" Cordal-Angliru. Aún tuvo mayor protagonismo, aunque más en su descenso, en la Vuelta de 2005, aquella cuya meta se situaba en Valgrande-Pajares, cuando el Liberty, comandado por un Roberto Heras que haría su última gran demostración, destrozó a Denis Menchov, aspirante más que reputado, todavía con una crono en los últimos días. Fue una de las mejores etapas de la historia de la Vuelta, sin duda... Su última aparición en la Vuelta tuvo lugar en 2008, previa llegada a Fuentes de Invierno (San Isidro), en un singular diseño de bucles varios que recuerda al de la edición de este 2016 en la etapa de Lagos.
Esta vertiente norte del alto de la Colladiella ya la vimos en su día. Parte de la localidad de Sotrondio y consta de una segunda fase bastante dura, si bien puede accederse tras acometer La Invernal (desde el noroeste) o La Bobia (desde el nordeste). La primera cuenta con un ramal espectacular, durísimo, que será el protagonista en esta ocasión.
Partiendo
de las cercanías de Sotrondio tomamos una estrecha carretera que se
dirige a la localidad de Invernite. Paso sombrío y con rampas durísimas
ya desde el inicio, los 500 metros iniciales alcanzan hasta el 22% de
rampa máxima y una media del 16%... Tramo vertiginoso que reduce su
dificultad para cerrar el primer kilómetro de manera más irregular,
poco antes de llegar a Invernite (kilómetro 1,2), pueblo donde las
pendientes son muy suaves (casi llano). Para alcanzar el desvío aún
habremos de superar una fuerte rampa de hasta el 13-14%, una manera de
"despedirse" de la dureza inicial y afrontar una subida ya más
"humana". Giro a la izquierda, hacia la Invernal (a la derecha
descenderíamos a El Entrego), para subir casi dos kilómetros más, muy
irregulares, con poca dureza general y por una carretera más ancha que
la anterior. La subida concluye tras pasar la localidad de La Invernal
en una curva donde no espereis ningún cartel indicador. Algo más de dos
kilómetros nos conducen a la carretera de la Colladiella, que
alcanzaremos cuando aún nos separan 5,7 kilómetros de la cima, los más
duros del puerto, muy regulares, sobre todo tras pasar la localidad de
Peraveles. A partir de ahí pendientes al 8-10%, con algún leve "pico"
al 12-13%. El global nos habla de un puerto de 11,9 kilómetros a una
pendiente media del 5,04%, si bien se trataría de dos puertos en uno:
uno inicial muy explosivo y otro, de mucho más empaque y, como hemos
visto más arriba, más historia ciclista.
Este es el perfil de la ascensión:
Mapa de la subida en Google Maps: