Suave
ascensión situada en el centro de Asturias y que consta de varias
vertientes. Arranca ésta desde el norte, de la carretera que proviene
de Cancienes y se dirige a Posada de Llanera. La subida en sí no tiene
ningún tipo de misterio, con una primera parte atractiva, con
pendientes que llegan al 5-6%, alguna "paella", asfalto impecable y
sólo con el debe de no contar con arcén, algo que sería necesario pues,
sin tener con excesivo tráfico, sí que tiene algo, como corresponde a
una carretera autonómica del centro de la región.
Coronamos la Miranda a 240 metros de altitud, tras no tener la sensación, en la segunda fase, de no estar ante un alto "de verdad" (pierde mucho fuelle). Ideal subida para combinar con otras cercanas de similares características en cuanto a longitud, aunque de más dureza (como el Robledo, Alvarés, la cara este de este mismo alto de la Miranda, y, por supuesto, el Violeo, relativamente cerca de aquí).
Éste es el perfil de la ascensión: